Un menor denunció los movimientos del presunto asesino serial Matías Jurado, acusado de captar y descuartizar al menos cinco personas en situación de vulnerabilidad. La justicia no descarta más víctimas.

Un estremecedor caso sacude a la comunidad de la Provincia de Jujuy y el Pais. En un operativo policial se hallaron restos óseos humanos en una vivienda conocida por los vecinos como la “Casa del Horror”, ubicada cerca de un basural en las inmediaciones del barrio. El periodista Marcos Huanca de SKY FM 106.1, en diálogo con un programa del periodista Tomas Mendez de Cronica TV, brindó detalles escalofriantes sobre la investigación: “Parte de los restos óseos fueron encontrados dentro de la casa y otra parte se encontraron en el descampado”.

Según reveló el locutor radial de SKY FM, el caso salió a la luz gracias a la denuncia de un menor de 16 años, presuntamente sobrino del acusado, Matías Jurado. Este joven habría presenciado situaciones sospechosas durante las visitas a la vivienda, principalmente los días viernes. “Veía situaciones extrañas, fue alertando a otras personas. Hoy es testigo clave en la causa”, señaló el periodista.

La investigación judicial en curso apunta a Jurado como único imputado, aunque no se descarta que otras personas sean llamadas a declarar o incluso imputadas. “El fiscal dijo que no se descarta la posibilidad de que haya más responsables”, informó Huanca, agregando que las pruebas halladas incluyen ropa, gorras, buzos y restos con sangre y piel humana, algunos ya identificados como pertenecientes a Jorge Anachuri, una persona previamente desaparecida.

El horror no termina ahí. Se sospecha que Jurado captaba a personas en situación de calle, prometiéndoles comida o trabajo, para luego llevarlas en taxi hasta su domicilio. “Era gente vulnerable, engañada con alguna changa. Las subía al remis, las llevaba a su casa y allí las mataba”, relató el periodista oriundo de Perico. Incluso, hay testimonios de un remisero que llevó en repetidas ocasiones al acusado junto a distintas víctimas.

Vecinos del barrio habían notado comportamientos extraños y olores nauseabundos provenientes de la vivienda, pero el miedo impidió las denuncias. “Era un tipo problemático, agresivo con vecinas mayores y menores. Nadie se acercaba”, dijo Huanca en el canal nacional de noticias, destacando que “algunos sabían lo que pasaba, pero temían por su seguridad”.

El imputado, Matías Jurado, tiene antecedentes penales. Estuvo preso tres veces por robo y una por homicidio, cumpliendo diez años de condena. Tras allanamiento fue hospitalizado brevemente por problemas de salud mental, “los exámenes médicos determinaron que es imputable. Hoy está detenido en el penal de Gorriti”, confirmó Huanca.

Los fiscales ahora trabajan con imágenes de cámaras de seguridad y esperan resultados de ADN para vincular a otras víctimas. Se barajan cifras aún más alarmantes: “Se habla de hasta quince personas, lo que lo convertiría en el descuartizador más grande de la historia del país”, sostuvo el periodista jujeño.
El caso conmociona por la brutalidad de los hechos y por el aparente desinterés de ciertas instituciones que permitió que las desapariciones se acumularan sin respuestas. “Salió peor”, concluyó el periodista al referirse al fracaso del sistema de resocialización penal.

La noticia ha generado un fuerte repudio e impacto en redes sociales y medios locales, que exigen responsabilidades institucionales y justicia para las víctimas.

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